Caminar es creer en mi

El caminante tiene necesidad de hacer honor a su nombre

Hace muchos años, a mi me parece que fue ayer, me decía Don Silvino Real Martinez, mi primer Maestro serio, que para creer había que ser decidido y tener confianza en los demás. Era, ir a una tienda y pedir al tendero, que algunas veces ni conocías, un bote de melocotones. El te lo daba y tu confiabas que, en aquel bote, iban, eso, melocotones. Caminar es, un poco o un mucho, eso mismo,es un acto de fe, cada vez que intentas dar un paso, no sabes lo que puede acontecer pero tu lo haces y sin darte cuenta te vas sorprendiendo continuamente mientras caminas. De ahi que sea tan ilusionante la función de Caminar, es un continuo descubrir lo que halla uno a su paso y descubrirse a sí mismo. A ese placer de contemplación hay que añadir el otro, del constante desafío de quedarse en la comodidad o seguir en la pesquisa de lo siguiente, de lo que hay un poco mas allá.Yo nací con el ansia de tener un primer pensamiento de tirarme hacia delante y, casi, al instante poner remedio a la caida, adelantando la otra pierna para evitarlo.

La vida es un acontecer generoso. Está siempre presta a brindarte algo nuevo, algo que regale tus sentidos, lo que ocurre que nosotros, no siempre estamos en condiciones idoneas para recibir, como debiéramos, esas dádivas, por lo que la sorpresa no cumple el objetivo que quisiéramos que cumpliere. Pero también esos momentos encierran su encanto y, sobre todo, entrañan una dósis de enseñanza que, bien aplicada, nos sirve de expreiencia para futuras situaciones.

Cada paso que da el caminante, le brinda una nueva perspectiva de lo que había antes de hacerlo. Todo se parece y nada es igual. Casi siempre tenemos la idea del inmovilismo, pero no es así. Cuando movemos la otra pierna para evitar la caida, ya hemos cambiado lo inmediato y el horizonte. Y lo que había detrás de nosotros, también está totalmente cambiado. Hasta nosotros mismos, en nuestro interior, es diferente. La percepción de las cosas, es distinta y nuestro filtro receptor ha sufrido también una mutación, en la línea que el nuevo momento lo marca. De ahí que sea tan gratificante el caminar, porque une al hecho de evitar la caida, regalar los sentidos con todo lo nuevo que hallas, con solo hacerlo. Desde que supe que, una vez que deje este mundo, voy estar billones de años luz inactivo, no soporto, mientras mis fuerzas me acompañen, la idea de estar quieto. Y ya no me refiero solo al movimiento de las piernas, a las que uso solo como un símil comparativo, sino a la mente. Para varias cosas, muy importantes, la vida me ha dado un icono y cuando algo se me atraviesa y reniego de la situación, inmediatamente aparece mi referente, que no es otro que, el nunca suficientemente bien reconocido, Director de nuestra bien querida Encomienda Mayor de Castilla. Nuestro Director es un milagro continuo haciendo lo que hace. Habrá quien diga “Gracias a la familia y personas que le apoyan” Cierto, pero eso mismo es parte del milagro de andar. Yo, ya lo digo mas arriba, a veces me pararía, pero recordando al modelo que tengo, me aborrecería a mi mismo si lo hiciere. Eso es caminar, hacer el milagro de moverte en busca de otro lugar, físico o mental, pero hacerlo.

El Caminante sigue su andadura en busca de su identidad y como ser pensante, va orientándose por los hitos que pusieron los que antes han pasado y con la mente puesta en quien, con su singular ejemplo, le sirve de Norte y estímulo. Larga vida a Encomienda y a su creador. Los que vamos poniendo mojoncitos, hagámoslo de forma que los que atrás vengan, no se pierdan en las encrucijadas que hallarán a su paso.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: