En una escapada relámpago, me acerqué por la Capital del Reino. No podía, estando por aquellos lares, pasar sin visitar al maravilloso Equipo que componen las Damas que, dirigidas por la bellísima y encantadora profesora, Sole. Por lo tanto, robé tiempo al tiempo, y, en compañía de mi Parte Luminosa, mi hija Beatriz, vestido como mandan los cánones, me reintegré al
magnífico grupo. Realmente os aseguro que MERECE LA PENA
Danzamos hasta quedar exhaustos. Nos divertimos hasta decir basta. De eso se encarga Sole quien, con sus ágiles movimientos y su arte escénico incomparable, nos contagia, haciéndonos sacar fuerzas hasta de donde no quedan. Pero MERECE LA PENA.
Que Zumba es arte nadie lo duda. Que Zumba une mundos diferentes, he ahí la prueba. Oriente y Occidente se abrazan y al abrazo se incorpora el arte incomparable afroamericano que funde pensamientos, sueños y realidades. Y en medio de tanta belleza, este intruso hambrón de la vida, de la que está enamorado hasta la saciedad. Gracias Sole, gracias amigas todas, por permitirme y hacerme tan bello regalo de compartir con vosotras tan maravillosos momentos. Y gracias a tí, mi hija, no en vano eres Mi Parte Luminosa. Gracias a todas y hsta pronto. Ya estoy deseando volver porque, realmente MERECE LA PENA.